¿Tu hijo da más vueltas que un molino con tal de no ponerse a estudiar o hacer deberes?
Cuando hay algo que preferimos no hacer pero que sabemos que debemos hacer, se activan las áreas de nuestro cerebro que se asocian al dolor y por eso, tendemos a evitarlo. Buscamos excusas, perdemos el tiempo y luego…. ¡vienen los remordimientos!
Para evitar todo ese ciclo, que en psicología llamamos procrastinación, te propongo establecer una rutina de trabajo con tu hijo:
¿Qué debe hacer?:
Muy Importante: Acuérdate de adaptar los tiempos de concentración a la edad y capacidad de tu hijo.
Probablemente tendrás que empezar con períodos pequeños de concentración para luego ir aumentándolos poco a poco.
Y si si tú también te distraes con facilidad, no dudes en usarla. La técnica Pomodoro no es una técnica de estudio sino de gestión del tiempo y productividad.
Si tu hijo necesita clases de refuerzo de Primaria y ESO para desarrollar su capacidad de aprendizaje, superar exámenes, adaptarse mejor al día a día escolar y mejorar en su rendimiento, ¡no lo dudes!
¡La primera sesión de prueba es gratuita!
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